Hace pocas semanas la primera mujer alcalde de Son Servera dejaba su cargo, tal y como se pactó al inicio de la legislatura y como viene siendo costumbre.
A lo largo de estas semanas hemos podido leer, en diversos medios, muchos y variopintos elogios hacia la Sra. Troya, así como algunas críticas.
Queremos citar, muy especialmente, una frase publicada por las Juventudes Socialistas de Son Servera: “Una alcaldesa jóven, moderna, feminista, cercana, accesible, conciliadora, valiente, justa y una gran socialista”.
Tales afirmaciones generan nuestra pregunta: ¿se pueden atribuir todos estos elogios a una persona que ha negado sus derechos a un enfermo de cáncer durante más de un año hasta su fallecimiento?
Seguramente no entendéis la razón de una cuestión tan dura ni los motivos que nos empujan a difundir esta historia; en primer lugar porque ni Ayuntamiento ni Alcaldesa saliente lo harían público por voluntad propia, por motivos más que obvios como se verá a continuación, y en segundo lugar porque los abajo firmantes (y no firmantes) amigos del Agente de policía local de Son Servera, Daniel García Parra, nos habíamos comprometido a guardar silencio para no perjudicar el procedimiento judicial.
Pero, aunque lenta, la justicia dictó sentencia por fin para nuestro compañero y amigo y, por tanto, podemos dar a conocer una historia que no puede pasar sin salir a la luz.
A principios de junio de 2015 llegó en forma de whatsapp un mensaje de Dani: “Chicos, no quería preocuparos porque algunos ya estáis muy afectados por el tema pero, me han operado y en dos semanas empiezo quimio. Todo bien. Tranquilos”. El cáncer, esa maldita enfermedad que a día de hoy sigue azotando de la manera más cruel a nuestra sociedad, se hizo presente en la vida de Daniel García, “Manda”, para sus compañeros de trabajo y “Presi” para sus amigos (no sabemos bien con qué nombre se dirigía a él la Sra. Troya en sus años de colegio en común), a sus 35 años.
En medio de la dureza y el dolor que genera enfrentarse al diagnóstico, nace su primer hijo a finales de agosto, en el mismo hospital donde recibía tratamiento de quimioterapia.
Obvia y lógicamente recibe una prestación económica por la baja por enfermedad (derecho adquirido gracias a la lucha de varias generaciones). Según lo establecido en el pacto de los trabajadores debería recibir el 100% de su salario base y los complementos al tratarse de enfermedad grave.
La cruda sorpresa (no al nivel del diagnóstico) pone en evidencia la calidad humana del equipo de gobierno “socialista” encabezado por la Sra. Troya pues la Admistración interpreta unilateralmente que no todos los complementos se deben incluir en la prestación que iba a percibir Dani y el grupo municipal NIEGA a Daniel García Parra el derecho a percibir complemento pactado de 183,33€ al mes.
Dani, persona inteligente, preparada y conocedora de sus obligaciones y derechos, presenta el oportuno recurso al Ayuntamiento y recibe una carta firmada por la Ilustre Alcaldesa, Sra. Troya, donde se le vuelve a negar esta cantidad. Oficialmente se argumentó la negativa en base a un informe técnico, extraoficialmente (sabido de diversas fuentes) textualmente: “que no lo podía pagar porque la oposición le haría la vida imposible”.
Sra. Troya: ¿la oposición le haría la vida imposible por pagar 183,33 euros al mes, a los que tenía todo el derecho, a un enfermo de cáncer con un recién nacido en los brazos? Y, de ser así, ¿no debería ser el cometido de una alcaldesa socialista pelear por los derechos de este/su trabajador?
Al segundo recurso que presentó Dani nunca llegó una respuesta. ¿Optó la Alcaldesa por el silencio administrativo porque le daba vergüenza volver a negar a Dani sus derechos?
Mientras el cáncer se extiende y Dani se enfrenta a otra operación e infinitas sesiones de quimioterapia al mismo tiempo que se ve obligado a pleitear con el Ayuntamiento de Son Servera e ir a juicio una vez agotadas todas las posibilidades para reclamar lo que es suyo, o más bien como él decía: “no es por mí, es por mi mujer y mi hijo… por lo que pueda pasar”.
El cáncer, desgraciadamente, ha sido más rápido que la justicia. A finales de agosto, mientras el pequeño Dani celebra su primer cumpleaños, su padre se enfrenta a la última operación, el último y desesperado intento de salvar la vida.
Nada ha funcionado. Nada ha hecho efecto. Fallece el 29 de octubre de 2016. A una semana de cumplir 37. No vamos a describir nuestros sentimientos al recibir la noticia. Muchos sabeis lo que se siente en un momento así.
Pero sí que hacer mención especial al desfile de integrantes del Consistorio por el tanatorio: ¡acababa de fallecer un policía del Ayuntamiento! Ese mismo policía a quién estas personas han obligado ir a juicio para reclamar sus derechos: una por firmar la denegación, la misma por omitir, otras por conocer los hechos y no actuar y otras por no tener ni siquiera constancia de lo que había pasado.
Sólo un detalle de difícil descripción: en el momento que la Alcaldesa se encontró cara a cara con la viuda de Dani, la Sra. Troya no tuvo el valor suficiente para presentarse como tal, en honor a su cargo. Una simpatizante de PSOE la presentó a la viuda como una amiga… ¿de quién?
El fallecimiento de Dani interrumpió el proceso judicial momentáneamente, retomándose al firmar la viuda la documentación pertinente.
Ahora, el 17 de junio de 2017, casi 8 meses después de su fallecimiento, la Juez le da la razón, una razón sabida por todos menos por la Sra Troya y su equipo.
Dictada la sentencia podemos, por fin, contar esta historia y cumplir con la deuda que teníamos pendiente con Dani. Él quería hacer públicos estos hechos, en beneficio de futuros casos que desgraciadamente muy probablemente habrá, y nosotros, hoy, lo hacemos por y para él.
Empezamos esta carta citando unas palabras dedicadas a la Sra. Troya por las Juventudes Socialistas de Son Servera; y la vamos a terminar, sentencia en mano, citando al líder actual del PSOE, Sr. Pedro Sánchez, con una de sus célebres frases, dedicándosela también a la Sra. Troya: “Usted no es decente”.
P.D. A título puramente informativo: costas de este absurdo juicio, al que no debería haberse llegado, lo pagarán los contribuyentes del municipio de Son Servera.
Carlos García Vilches, Jose Manuel Grande Roman, Galyna Kogan Kogan, David Layunta Hinojo, Jose Maria Barrero Marchan, Daniel Gomáriz Sanchez, Sergio Miguel Porte Àlvarez, Juan Hernández Marco, Marco Antonio Gómez Silva, Raúl García Sanchís, Rafael López Rodríguez, Carlos Gomez Del Rio, Jose Antonio Perelló Chamarro, Ross Alcina Stapleton.
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